Primera lectura


Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 4, 1-5


Vean, pues, en nosotros a servidores de Cristo y a administradores de las obras misteriosas de Dios. Si somos administradores, se nos exigirá ser fieles. Pero a mí no me importa lo más mínimo cómo me juzgan ustedes o cualquier autoridad humana. Y tampoco quiero juzgarme a mí mismo. A pesar de que no veo nada que reprocharme, eso no basta para justificarme: el Señor me juzgará.

Por lo tanto, no juzguen antes de tiempo; esperen que venga el Señor. El sacará a la luz lo que ocultaban las tinieblas y pondrá en evidencia las intenciones secretas. Entonces cada uno recibirá de Dios la alabanza que se merece.


Palabra de Dios



Salmo


Sal 36, 3-4. 5-6. 27-28. 39-40